La Conmebol dio a conocer este viernes, mediante un comunicado, que a partir de la edición del próximo año, la Copa Libertadores definirá su campeón en final única. Dicha decisión, según el presidente de la Confederación, se tomó de manera unánime en el Consejo realizado en Uruguay.
«Más que un partido, este será un gran evento deportivo, cultural y turístico que traerá grandes beneficios para el fútbol sudamericano, sus clubes y sus aficionados. Esta emocionante contienda ofrecerá un espectáculo deportivo de clase mundial y una mejor experiencia en casa y en el estadio», expresó Alejandro Domínguez, máximo dirigente de la Conmebol.
Además, dicha final se jugará un sábado y será «transmitida en un horario estelar, desde un campo elegido con antelación». Así mismo, se aumentarán los premios que recibirán los clubes finalistas, quienes pasarán a obtener dos millones de dólar más el 25% del valor que se recoja, por efectos de taquilla, en la final, dinero que será adicional al que se le da al campeón y al subcampeón, que en 2018 es de 6 millones USD y 3 millones USD respectivamente.
Para elegir la sede que albergará la final de la Libertadores, Conmebol «trabajará junto con el consorcio de consultaría integrado por las empresas IMG & Perform», junto con quienes también se definirán los parámetros de «la organización, logística, seguridad, tecnología, transmisión audiovisual y comercialización» para el encuentro decisivo del torneo continental.
